sábado, 14 de octubre de 2017

Suicidio de varios egos

No sé, pero es extraño ese punto sin ego. Es extraño ver como todo lo que nos rodea se hace cada vez más grande y ver piedras del olimpo que se estampan contra tus cueros.

Ese ego que haría que la muerte no se entere o que simplemente no haga que quiera cantar en discotecas de mala muerte con el demonio a mis espaldas mientras me bebe.

Veo un falso rojo escapándose azotando un montón de mesetas que riego cada día sin esperanza, sin pasión, sin alegrías o sin antiguas hazañas.

Cada recuerdo clava una pequeña navaja en cada poro de mi mente, y sin fuerza alguna, mirando el cielo, ya no sé qué que cueva siente.


Esperaré sentando en mi ventana, mirando tu culo pasar en cada hoja de papel, o esperando poder volver a tener ese incendio que me haga volver a creer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario